Queridos Amigos del Billar:
Ayer domingo 16 de diciembre de 2012, cayó el telón del Circuito “Mar y Sierras”, con la disputa del 3er. y último Gran Prix en la reconocida sala de La Perla del Atlántico: el Centro Italiano Marplatense.
Si bien no tengo la información oficial, por haberme retirado con mis acompañantes, al inicio de los Cuartos de Final, puedo adelantarles esta información que, en cuanto a los puestos de vanguardia de este Torneo y del Gran Prix 2012, es correcta; solo faltan cifras y demás datos de interés, conjuntamente con las posiciones finales a partir de la 5ta. ubicación con sus promedios, boladas, etc., pero lo fundamental está.
Vamos entonces con el ganador del Gran Prix del Circuito 2012: Federico Janices, representante del Centro Italiano Marplatense.
Este joven y talentoso billarista del CIM, ya no sorprende a nadie, al menos para los que transitamos por el billar.
Cuando un billarista realiza partidas de 0.800 para arriba, no hay dudas que es un jugador de cuidado a quien hay que respetar y mucho.
En esta etapa de su formación, basa gran parte de su juego en su preciso “tome de bola” y aunque viene progresando en forma acelerada, es imprescindible para él, adquirir más conocimientos teóricos y de ejecución para consolidarse como el gran billarista que insinúa ser.
Pero eso para “Fede” por ahora no parece interesarle mucho o no tiene quien le pueda enseñar; él con esa arrolladora juventud lo hace más fácil todo y por ahora le alcanza.
Para los “mayorcitos” el aspecto físico y visual es fundamental y para él, esta parte no es problema.
No dudamos en afirmar que no bien incorpore estos condimentos a su juego, seguramente estaremos en presencia de un excelente billarista con una proyección de futuro insospechada; de él depende.
Las puertas están abiertas; bienvenido sea entonces este “rebelde” del billar a la especialidad de 3 bandas…!!!
El billar argentino está necesitando de chicos como él en esta disciplina, hacen buena falta nuevas corrientes, nuevas brisas de aire fresco y remozado para renovar y fortalecer lo poco que actualmente tenemos en “las 3 bandas”
Nuestras felicitaciones para Federico por haber finalizado al Tope del Ranking 2012 con sus inalcanzables 60 puntos….!!
En el 2do. lugar se ubicó Luis Corbalán de Santiago del Estero, quien resultó el ganador de este 3er. Torneo del Circuito; Luis reunió 55 puntos de Ranking.
El 3er. puesto fue para Juan Carlos Giannotta del CIM con 50 puntos de Ranking y el 4º lugar fue para Julio Arellano del Círculo del Once, otra de las revelaciones del circuito, con 42 puntos de Ranking.
Felicitaciones para “Fede” Campeón del Circuito..…!!!
Felicitaciones para el Subcampeón, Luis Corbalán….!!!
En cuanto a este último Gran Prix, disputado en el CIM, fue campeón del mismo, como ya dijimos en párrafos más arriba, Luis Corbalán de Santiago del Estero.
Este aguerrido santiagueño, se impuso en la partida final 25 a 22 en 18 entradas, a Juan Pablo Sisterna del Círculo del Once.
Previamente en semifinal, Luis se había impuesto a Carlos “Coco” Zárate (3ro. en la Clasificación Final) 20 a 13 en 23 y 22 entradas, respectivamente, mientras “Juampi” (4ta. ubicación para él) hacía lo propio frente al campeón del Circuito “Fede” Janices, por 20 a 16 en 19 y 18 entradas respectivamente.
Del 5º al 8º puesto ignoro el orden por carecer de datos pero voy a aventurar ubicaciones de acuerdo a lo que ví hasta retirarme de la sala: para mí es 5º Rubén García del CIM, 6º Fabián Oliveto de Los 36 Billares, 7º Juan Carlos Giannotta del CIM y 8º Luis Losino también del CIM.
Bravo Corbalán…!!! Campeón del 3er. Gran Prix…..!!!
Buen trabajo Juampi Subcampeón….!!!
Hasta aquí es lo que puedo informar; les reitero que aún no tengo los datos oficiales, pero lo esencial está.
Finalmente deseo agradecer a todos los que colaboraron, como siempre lo hacen, para que se pueda disputar un torneo de billar.
Les confieso que valoro esa colaboración porque es fundamental para que todo camine por los carriles normales.
También deseo agradecer a las meseras del CIM, tan bonitas y simpáticas, siempre atendiéndonos de maravillas y con muy buena onda.
Una mención especial para Raúl Rivero, cocinero y billarista; excelente lo suyo, sobre todo en la 1ra. de sus funciones.
No obstante, debo pedir disculpas a todos y muy especialmente a los participantes por haber decidido retirarme del torneo, lo cual me dejó un sabor muy amargo más allá de lo acontecido al momento de retirarme de la sala.
Luis Corbalán estaba jugando su partida de Cuartos de Final frente a Rubén García, en el preciso momento que yo me retiraba; interrumpió su partida y pidió a viva voz al resto de los jugadores que hicieran lo mismo, al tiempo que me llamó porque quería decir unas palabras.
Obviamente intuí que su actitud tenía que ver con este amargo incidente y como no me sentía en condiciones de quedarme a escucharlo, preferí irme.
Luego, ya en la calle me volvieron a llamar y para que no se malinterpretara mi actitud, decidí volver a entrar en la sala para escuchar unas cálidas y sencillas palabras de agradecimiento por todo lo que, según Corbalán, hago por billar, lo hizo en nombre de los jugadores participantes quienes conjuntamente con los presentes, me brindaron un cariñoso aplauso.
Mucho me hubiera gustado contestar este agradecimiento, que agradezco desde el fondo de mi corazón, pero no estaba “en vena” para poder hacerlo.
Nunca toleré las injusticias ni las arbitrariedades en todos los terrenos, lo cual me trajo alguno que otro problema a lo largo de mi vida, ya sea en el aspecto laboral o político; si nunca las toleré, mucho menos ahora que estoy más “grandecito”.
Tampoco las tolero en lo deportivo y más si se trata de este deporte.
Todos los que me conocen, saben que soy un tipo de carácter fuerte y que siempre voy de frente a la hora de discutir sobre todo lo que tenga que ver con nuestro deporte.
También soy muy afecto a las bromas y a todo tipo de chanzas en tanto y en cuanto no vayan más allá de las normas del debido respeto.
Durante los torneos que dirijo no estoy para bromas; solo me concentro en mi trabajo y trato de estar atento, dentro de lo posible, a que nada se salga de cauce.
En el transcurso de los mismos, soy muy parco a la hora de contestar consultas, algunas ya informadas y publicadas, que no hacen más que hacerme perder el tiempo y distraerme, por eso mi gesto adusto al responder, lo cual lleva a pensar a algunos (los que no me conocen) que soy “un viejo cabrón de pocas pulgas”.
Otros aducen que me comporto en forma autoritaria o dictatorial.
Miren: cuando uno esta inmerso en la tarea que insume un torneo, tiene que estar atento a todo e ir tomando decisiones, o sea lo que se dice ser ejecutivo; en mi caso personal, NO voy a hacer una “consulta popular” (billarísticamente hablando) a la hora de tomar una decisión.
No consulto a nadie; mucho menos a los billaristas que me van a responder (algunos), de acuerdo a su conveniencia, entonces procedo de acuerdo a mi leal saber y entender y sigo adelante.
Por supuesto que si hay algo fuera de contexto, consulto a quien corresponda para no llevar todo el peso de la responsabilidad que supone tomar esa decisión; yo acá me estoy refiriendo a cosas normales y cuestiones menores.
Tal vez por mis problemas auditivos, levante demasiado la voz (más aún si la discusión es caliente), lo cual me da mucha bronca y vergüenza a la vez; por ello pido sinceras disculpas a mis interlocutores ya que no está en mi ánimo imponer mis ideas a los gritos.
Pero nadie puede decir que no soy un tipo abierto a todas las opiniones y que no accedo a cambiar todo lo que amerite ser cambiado.
En medio de este incidente debo decir también, que el lugar donde me fue planteada la cuestión, no era el ámbito adecuado para hacerlo, ya que había varios participantes, sobre todo locales, cuya opinión sobre el tema me parecía, al menos a mí, que no era objetiva; porque se pierde objetividad cuando el que opina lo hace desde un lugar donde el desinterés está ausente.
Todo hubiera sido muy distinto puertas adentro, pero me invitaron a “bailar” afuera y acepté el convite, groso error de mi parte; cansado como estaba, mi ánimo no era el mejor para discutir.
Pretender cambiar una norma que se vino aplicando en todo el circuito, ahora, durante la disputa del último Gran Prix, me pareció no solo improcedente sino también descabellada e injusta.
Había varios billaristas “porteños” - como escucho decir, para disgusto mío, en algunas ciudades del interior - que se verían afectados con este cambio y eso me “sacó” más de la cuenta, por eso mi pedido de disculpas.
Que el planteo sea para futuros torneos, me parece bárbaro.
Nos sentamos en una mesa (allí sí, pueden estar los billaristas interesados en aportar ideas), y discutimos todo lo que tengamos que discutir y cambiamos todo lo que haya que cambiar, en tanto y en cuanto estemos todos democráticamente de acuerdo que así sea, pero tratar de “cambiar de caballo en mitad del río”, no me parece correcto, ni mucho menos saludable.
Finalmente, se decidió seguir el torneo con la misma reglamentación que en los anteriores, pero la discusión caló muy hondo en mi ánimo y yo ya no tenía más ganas de competir.
Justamente a mí que es lo que más me apasiona: la competencia billarística.
Poniéndole un poco de humor a la cosa, diría que me pasó lo que a Riquelme: “estaba vacío”.
Este incidente no me va a hacer cambiar la opinión que tengo con respecto a Walter Janices; si tuviéramos varios tipos como él y alguno otros que conozco en el “Mundo Billar”, seguramente este deporte tendría sólidos pilares en que apoyarse.
Su preocupación en cuanto a todo lo que tiene que ver para que un Certamen sea un verdadero acontecimiento deportivo, lo convierte en un profesional en la materia.
Con él formamos una dupla importante para llevar a cabo torneos de gran envergadura.
Aún perdura en la memoria de todos, aquel fantástico Gran Prix “Verano de 2009” (del 5 al 8 de febrero) que ganó Oliveto en la Final con Corbalán, que contó con la participación de 64 billaristas (fue necesario disputarlo en 2 salas: el CIM y el Casín Club) provenientes de diferentes y distantes puntos del país a los que se agregaron peruanos, chilenos, colombianos, etc. etc
Después se sucedieron otros, no menos importantes y siempre con el mismo resultado final: un éxito en todo sentido.
Ahora tuvimos esta diferencia, que reitero no cambia para nada lo que yo pienso sobre él, mucho menos que yo esté enojado o algo parecido, para nada; dolido sí, pero no enojado.
Va de suyo que le asiste todo el derecho del mundo para invitarme o “desinvitarme” a todos los torneos que en el futuro se disputen en su sala y nombrar al Director Deportivo que le plazca.
Pero sí debo aclarar que como Director Deportivo no estoy allí para decir a todo que sí, ni tampoco estoy dibujado; además nunca fui ni seré “Chirolita” de nadie, mucho menos en este deporte que tanto quiero y sobre el cual vuelco gran parte de mis esfuerzos para que el tiempo no lo tape con la manta del olvido; justamente al billar que tantos campeones nos ha dado……!!!!
Parafraseando al Diego diría que “el verde paño no se mancha”; por eso me calenté.
Es lo menos que puedo hacer desde mi lugar por los Augusto Vergez, Enrique Navarra, Pedro Leopoldo Carrera, Ezequiel y Juan Navarra, Marcelo López, José Argüello, Luis Martinez, Osvaldo “Chochi” Berardi y tantos otros que por ser tantos, no puedo nombrarlos a todos aquí.
Adjunto les remito la Llave de Eliminación Directa y algunas tomas que pude realizar con los 8 finalistas.
Reciban mi cordial Abrazo Billarístico.
Ricardo A. Migliavacca
Buenos Aires, Argentina
17/12/2012
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